Saber identificar cuándo cambiar los neumáticos, nos ayuda a economizar y evitar malos ratos.
Revisar los neumáticos se trata de una necesidad, ya que identificar algún desperfecto a tiempo puede hacer la diferencia entre una conducción segura y un posible accidente. Los pasos que debes seguir e identificar en relación a tus neumáticos son:

- Identificar el aspecto de los neumáticos y no solo basarse en la cantidad de kilómetros que figuran en el cuenta de kilómetros del automóvil ya que hay factores que los desgastan antes de tiempo. Es clave reconocer el tipo de terrenos en que se utiliza el auto.
- Revisar la superficie o banda de rodamiento por si existe un daño visible, hay piedras u otros objetos pegados en la rueda, poca presión, superficie irregular o las llantas o válvulas dañadas. Si se cumple uno de los puntos anteriores, es probable que se deba proceder al cambio.
Si se observan irregularidades en el neumático es importante revisar el tren delantero o amortiguadores del automóvil, ya que son las principales causas de este tipo de problemas.
Para mayor seguridad, podemos utilizar el criterio general, aún siendo menos preciso: se recomienda el reemplazo de neumáticos a los 45.000 kms., mientras que un neumático de menor calidad no debiera pasar los 10.000 kms.
Para buscar el reemplazo de los neumáticos, debemos ser cuidadosos en el tamaño a seleccionar, ya que éstos han sido pensados para un radio específico de ruedas y para soportar una determinada carga. Al utilizar neumáticos de distinta medidas pueden aparecer incidencias en la mecánica y en la conducción.
No debemos utilizar neumáticos de distinta medida y grados de desgaste distinto. Es importante considerar el cambio en las cuatro ruedas al mismo tiempo y no utilizar distintas medidas ni grados de desgaste sobre el mismo eje, ni siquiera en carácter de urgente.
Se recomienda que al cambiar sólo dos neumáticos, éstos vayan en el eje trasero y los que se encontraban en este eje pasarlos al eje delantero, debido a que estos se desgastan menos al no ser forzados a doblar.
Por supuesto, por cualquier emergencia, es clave siempre contar con el neumático de repuesto en buenas condiciones y una gata hidráulica.